CÓMO UN VETERANO CONQUISTÓ EL DAKAR
Uno de los participantes más seguidos del Rally Dakar de este año fue un ŠKODA 130 LR. Aunque tomó parte en la categoría Dakar Classic y disponía de un equipo experimentado, se trata de la primera participación de este modelo ŠKODA en la carrera del desierto.
A pesar de ello, el venerable ŠKODA 130 LR se comportó mucho mejor de lo esperado, superando retos increíbles, pese a nunca haber estado en el desierto, y aún menos en un Rally Dakar conocido por su dureza.
“Llevamos el coche al límite: algunos días recorrimos más de novecientos kilómetros, por lo que no había mucho tiempo para desmontar el coche y volverlo a montar. Aunque los componentes se hicieron con materiales modernos siguiendo el diseño original, la fatiga es inevitable. Muy pocas personas superan una prueba tan dura sin ninguna avería. Las cosas se tuercen incluso para los vehículos más resistentes, diseñados específicamente para la prueba. Además, nuestro coche era un veterano. Y hay algo de lo que uno debe darse cuenta: es una carrera, no un desfile de modelos. Nuestro objetivo no era tan solo cruzar la meta: estábamos compitiendo, por lo que no nos contuvimos. De hecho, ni siquiera es posible contenerse. No puedes aminorar la marcha, pues corres el riesgo de acabar constantemente atrapado en la arena”, dice el piloto Ondřej Klymčiw. Él y su copiloto, Petr Vlček, no eran nuevos en el Rally Dakar: ambos habían ya participado en la carrera en cuatro ocasiones anteriores, pero en la categoría de motos.